Elige el modo de juego y escribe el nombre de familia del oponente al que quieras invitar. Puedes ver las manos que hay que completar en cada modo desde el menú «Manos».

Tendrás que elegir un modo de juego antes de poder mandar la invitación, ya que determinará las manos disponibles en la partida y las veces que puedes sacar cartas.

Accede a «Manos» cuando hayas elegido el modo de juego para ver las opciones disponibles de ese modo en específico.

Las cartas que hayas elegido se mantendrán aunque cojas aún más cartas durante ese turno.

Puedes completar una mano en cualquier momento durante tu turno seleccionándola a la izquierda del menú de Yar.

Debes elegir una mano en específico para acumular puntos antes de que finalice tu turno. Si no escoges nada, se añadirán los puntos a una mano al azar que esté disponible.

Ganarás puntos al seleccionar los números grises que aparecen al lado de cada mano. Dichos puntos se añadirán a una mano al azar de las que queden disponibles si se te acaba el tiempo de tu turno.

No puedes volver a escoger la misma mano una vez le hayas metido puntos ni tampoco cambiarla. En las siguientes rondas tendrás que escoger entre las manos que queden disponibles.

También puedes acumular 0 puntos en una mano de forma voluntaria, si así lo deseas.

Tu puntuación dependerá de las cartas que hayas acumulado en cada mano. Algunas siempre darán la misma puntuación independientemente de las cartas que hayas sacado, siempre y cuando cumplas los requisitos.

Por ejemplo, con una mano de A, A, A, 2, 2, ganas 3 puntos si eliges «UNO es soledad» por tener tres A (o uno). En cambio, obtendrás 4 puntos si eliges «DOS son compañía» por tener dos 2. Pero ojo, porque esta mano también cumple los requisitos de «Boca del lobo», el cual otorga nada menos que 25 puntos.

Es esa estrategia inherente a cada partida lo que hace que el Yar sea tan adictivo, ya que tienes que estar pensando constantemente qué cartas usar o a por qué manos ir primero.